Y aunque pierdas la cabeza ahí estarás con la mirada fija en San Fernando o en el Prado de San Sebastián. Contemplando como avanza Sevilla y como retrocede en gamberrismo. Tú que has visto tanto y que todo te callas esperas que te restauren para seguir dando la hora al tranvía que pasa a tus pies.
Seguirás siendo sitio de celebraciones, espero sean más moderadas que las del Domingo y verás como pronto recuperas tu mirada para ver qué pasa en tu ciudad y ser dueña de esa fuente que por las noches ilumina mi capital.
Que nadie te haga un destrozo que eres santo y seña de la ciudad más maravillosa del mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario